Sin su gente, sin un 9, Peñarol luchará contra sus propios fantasmas, Diego Aguirre suma presión y quiere hacer pagar los platos rotos a San Antonio Bulo Bulo por Copa Libertadores

Peñarol sin gente. Peñarol con lesionados. Peñarol con poco fútbol y necesitado de un triunfo por la Copa Libertadores este martes cuando reciba a San Antonio Bulo Bulo en el Estadio Campeón del Siglo.

Es un desafío muy grande para Diego Aguirre y sus jugadores. No se trata de un partido más. Se enfrenta al supuesto rival con menor poderío futbolístico que de todas maneras, viene de dar el golpe en la altura de Cochabamba la semana pasada cuando derrotó en un compromiso muy cambiante a Olimpia de Paraguay 3-2.

El presupuesto del club boliviano –que fue el primero de todos en clasificar a esta edición de la Copa Libertadores, hace ya un año y en el partido contra los paraguayos, debutó en toda su historia en este torneo–, es muy inferior al de los carboneros.

Sin su gente, sin un '9', Peñarol luchará contra sus propios fantasmas, Diego Aguirre suma presión y quiere hacer pagar los platos rotos a San Antonio Bulo Bulo por Copa Libertadores

El de Peñarol creció con relación al del año pasado y es de US$ 2.000.000, según dijo su propio vicepresidente y tesorero, Eduardo Zaidensztat tras jugar ante Juventud en Las Piedras. Mientras tanto, su rival boliviano es uno de los más pobres de su país y tiene un presupuesto mensual de solo US$ 65.000, lo que hace que en el año llegue a US$ 780.000.

El plantel de entero de Peñarol tiene un valor de mercado de US$ 30.000.000, mientras que el de San Antonio Bulo Bulo asciende a US$ 7.500.000, según la página alemana Transfermarkt, que se especializa en estos temas.

Esa ventaja que tienen los aurinegros se tiene que ver en el césped del Estadio Campeón del Siglo. El rival no jugará en la altura de Cochabamba, como el miércoles anterior cuando asombró a todos venciendo al poderoso Olimpia de Martín Palermo.

Pero allí también se podrá apreciar cómo hace Peñarol para reaccionar a este difícil momento deportivo, a esta crisis que le dio un poco de aire –con los suplentes–, cuando vencieron el sábado a Danubio 1-0 en Jardines del Hipódromo por el Torneo Apertura.

Jugar sin público golpea por dos lados distintos

Peñarol está sancionado por la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) por sus tres partidos como local en el Grupo H, debido a la enorme cohetería que se lanzó en el Estadio Centenario en ocasión de la semifinal de la Copa Libertadores del año pasado ante Botafogo.

El club aurinegro ya había sido apercibido –y multado– en un par de ocasiones y este episodio fue el corolario por el que el máximo organismo del fútbol del continente, tomó esa decisión.

Si bien Peñarol recurrió al TAS, los tiempos de este no siempre coinciden con el calendario de los partidos del club, por lo que tanto este martes a la noche, como contra Olimpia –al menos–, los dirigidos por Diego Aguirre jugarán sin su público.

Esto implica un desfasaje económico, ya que según reveló un directivo del club a Referí, por este encuentro ante los bolivianos, los carboneros dejarán de percibir aproximadamente US$ 400.000 que hubiera sido la recaudación para un primer encuentro de fase de grupos.

Y el dirigente además sumó: “Aparejado a que no se venden butacas o se hacen nuevos socios”.

En toda la Copa Libertadores 2024, en la que a Peñarol le fue muy bien, se hicieron 10.000 asociados nuevos, lo cual siempre ayuda económicamente al club.

Pero también hay otra cara negativa de jugar sin su gente. Peñarol ya jugó contra Boston River por la tercera fecha del Torneo Apertura y no solo empató 1-1 en su propio escenario, sino que el partido fue un bodrio.

Se asemejaba mucho a una práctica por el hecho de que no hubiera nadie. Si los aurinegros repiten lo sucedido hace casi dos meses, se complicarán y mucho en la Copa Libertadores.

Las lesiones que tiene Peñarol para este partido

Otro de los puntos primordiales de cara al encuentro contra San Antonio Bulo Bulo, es que Diego Aguirre no podrá contar con tres futbolistas de ofensiva.

Contra Danubio se retiró lesionado Felipe Avenatti en el primer tiempo, mientras que el pasado miércoles frente a Vélez Sarsfield en el debut del grupo por la Copa Libertadores que se perdió 2-1 en el minuto 90+4’, se desgarraron Javier Cabrera y Maximiliano Silvera. En pocas palabras, Aguirre no tiene un '9' para este encuentro.

El Cangrejo venía jugando muy bien en los últimos compromisos, en tanto que Silvera es determinante en el área.

Tal como informó Referí este domingo, las pruebas que hizo Aguirre a puertas cerradas en el propio Estadio Campeón del Siglo, en el puesto de Maximiliano Silvera, fueron Alexander Machado, y también David Terans como falso ‘9’.

Otro tema diferente es cómo puede suplir a Javier Cabrera. Diego García, de buen partido en Jardines, tiene chance de jugar como extremo. De no hacerlo él, Aguirre probó a Héctor Villalba.

Peñarol luchará contra sus propios fantasmas y Diego Aguirre suma presión ante los resultados adversos. Su espalda sigue siendo ancha y el presidente Ignacio Ruglio no lo va a mover de su puesto en todo el año. De todas maneras, el club se preparó para esta Copa Libertadores y no puede dejar de sumar de a tres ante un rival del que poco se sabe, pero que puede y debería pagar los platos rotos en el Estadio Campeón del Siglo.